Estimadas familias:
Relato a relato hemos llegado al final. Hoy le toca el turno a sexto, "La patinadora misteriosa" de Cristina I.C.
Érase una vez una patinadora, llamada Amanda, nació en Milán en 1.993. Todos hablaban de ella. Hasta en las esquinas del cole se escuchaban murmullos sobre Amanda. El 16 de agosto de 2.005 Amanda se fue al parque con sus amigas, estuvieron hablando y dando un paseo hasta que su amiga Laura dijo:
- ¡Tengo una idea!
Todas las demás dijeron:
- ¿Qué idea tienes?
Y Laura respondó:
- ¿Por qué no jugamos al pilla pilla?
Sus amigas la miraron y le dijeron:
- Laura, tienes mentalidad de niña de tres años, nosotras ya no jugamos a eso, ese juego es para niños pequeños.
Laura, muy triste, se sentó en otro banco
Amanda fue a sentarse con ella para acompañarla, Amanda le dijo a Laura:
-Laura no te preocupes a mí me gusta ese juego y no creo que sea solo para niños pequeños, si quieres puedes jugar conmigo.
Pero Laura le dijo que ya estaba cansada, que mañana ella iba a volver a ir al parque.
Al día siguiente Laura y Amanda volvieron a ir al parque. Cuando jugaban al pilla pilla se encontraron una avioneta. Laura y Amanda fueron corriendo hacia ella, se sentaron y empezaron a pulsar todos los botones. La avioneta despegó del parque y se dirigía a un lugar desconocido. Al cabo de 30 minutos, o una hora, la avioneta se quedó sin combustible y aterrizaron en una montaña. Detrás de los asientos traseros había u chico llamada Max que estaba descansando. Laura y Amanda lo despertaron super nerviosas y no paraban de hacerle preguntas.
Cuando se bajaron de la avioneta había un cartel gigante que decía: "Welcome to London". Los chicos se sorprendieron mucho y gritaron los tres a la vez:
- ¡¡Estamos en Londres"
Ellos fueron a las panaderías para comprar algo de comer. Cuando salieron de las panaderías Amanda se tropezó con un chico llamado Hugo, que pasaba por la calle. Hugo es un chico muy simpático y él les preguntó:
-¿Estáis perdidos?
Los chicos les contaron su situación. (Hugo sabía hablar varios idiomas entre ellos, el italiano). Hugo se preocupó mucho y les invitó a su casa. En su habitación idearon un plan para que pudieran volver a Milan. Durante toda la tarde estuvieron pensando como podían volver. Hasta que Hugo dijo:
- ¡Ya sé como podéis volver! En mi desván tengo un globo aerostático!
A primera hora del día siguiente ya lo tenían todo preparado (fueron a la montaña donde aterrizó la avioneta). Sobre las doce y media o la una de la tarde llegaron a Milán. Los chicos, después de tener una larga charla con sus padres, los castigaron nos días sin salir de casa.
El 31 de agosto, Amanda patinaba en un pabellón y... ¡qué sorpresa! Laura, Max y otros amigos de Amanda estaban allí. Cuando fueron a dar los resultados de los votos, Amanda quedó en el primer puesto. ¡Todos lo celebraron con una gran fiesta!
Y con este relato damos por concluido el I Certamen de relatos cortos del Ampa. Esperamos que los peques hayan disfrutado de todo lo que hemos preparado para ellos.
Y de nuevo, gracias a todos los que han participado.
Un saludo.
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